No suelo hablar de mis hermanos/as, padres y cuñadas/os… pero hoy lo voy hacer.
Una mención especial a mi cuñada, “la tía favorita de mis hijos”.
“La tía favorita de mis hijos” es una mujer extraordinaria, no solo lo digo yo, si no toda la familia, madre de 2 niños y gestando la princesa de la casa cuenta con 3 varoncitos mas, mis hijos.
Ella es una mujer fuerte que enfrenta a la vida y le dice por donde va, es capaz de irse de paseo en plena gestación con 5 niños, volver a casa feliz y tener el descaro de decirme, estos niños son fantásticos. Yo me quedo en shock, ¿fantásticos?, pero si yo he hecho ese mismo recorrido con los 5 niños (Jorge (7 años) y Enyel (Casi 7 años) cada uno al lado del gemelar. En el patín del carrito Bryson (3 años) y montados Guillermo (1 año) Pablo 3(años) ) Son unos
Cuando he llegado al parque estoy con tal nivel de ansiedad que los suelto como si fueran cabras y lo primero que les digo es: No quiero conoceros si venís con algo roto, el parque es para pasarlo bien, no es un campo de batallas y los numeritos sobran. Bryson y Pablo no alejaros de mi vista, Jorge y Enyel sobran las palabras…Y sin terminar mi discurso el único que queda es Guillermo y es por que siempre lo dejo para el último en el carrito.
La hora u hora y media que solemos durar en el parque es un ir y venir de: mamá, tita, mamá, tita, con un sin fin de numeritos, ( la pelota no la encuentro, el columpio lo han subido, he pisado una caca, el tobogán no resbala, Enyel esta subiendo al revés por este, Jorge no me deja el balón, los mayores no me dejan jugar con ellos, Bryson nos esta echando tierra…) en las que yo pienso: ¿Con qué fantásticos no?, ja!.
La vuelta a casa no es mejor que la ida, si no peor, no hay ganas de volver y siempre los chafo en el mejor momento del parque, tengo que ir cazándolos uno por uno y vigilando que ninguno se me escape y, cuando logro retomar la marcha llevo la cantaleta de: jo! Mamá ahora que estábamos jugando con Lucas y Mario, Tita nos quedamos un poquito mas, yo quiero montarme mas tiempo en el tobogán, yo no me he montado y quiero quedarme, mi mami nos deja mas tiempo, la tita siempre se espera a que terminemos…y yo pienso ¿Fantásticos? Ja!.
Tengo que reconocerlo, “la tía favorita de mis hijos” es una mujer con mucha paciencia, ella les sirve la merienda satisfaciendo los gustos de cada uno y es capas de tenerlos sentados a la mesa 20 o 30 minutos a la vez. Y venirme con su descaro de, hay que tranquilos y educados son estos niños. Yo vuelvo a quedarme en shock. ¿Tranquilos y educados?. Yo nunca he podido tenerlos en la mesa mas de 10 minutos y durante este tiempo siempre hay batalla. Bryson y Pablo son de “culito veo, culito quiero” y cuando lo tienen ya no los quieren y Jorge y Enyel son de “Es mucho, esta caliente, quiero mejor de esto, por que Enyel toma eso, yo quiero el mismo zumo que Bryson, es poco, esta frio…” Vamos, una odisea, si preparas el mismo menú para todos malo, siempre hay alguno que no le gusta (aunque la semana pasada le gustará) y si personalizas el menú siempre quieren el de al lado… Y yo mientras me evado entre cortinillas voy pensado ¿tranquilos y educados? Ja!.
Mi cuñada es un ángel ciego y sordo, es mi conclusión que le repito todos los días cuando hablamos, le digo “Tía favorita” tus hijos son unos “chichos” casi, casi como los míos, vamos, que tienen lo de “fantásticos” donde yo tengo lo de pelirroja, encerrado en caja fuerte bajo tierra, casi llegando al núcleo y eso de tranquilos y educados, ¿eso? Vamos, esos niños no saben ni por asomo lo que significan esas dos palabras… al terminar la “tía” va y se ríe y termina poniendo la guinda al pastel, “Estoy tan animada que después de la niña vendrá un 4º”, yo paralizada al teléfono, casi infartada, solo pude decir: no podré bajar con 7 al parque, se que no podré, no podré estar con ellos en casa sin supervisión medica me podría dar un infarto… y mi querida prosigue: con el 4º nos pondremos de acuerdo para sumar 8 bellezones… Se que siguió hablando pero estaba en shock y solo escuchaba piiiiiiiii.
No hay duda de que es fantástica y aventurera, mi madre siempre le dice: tu debiste ser “torera” por que hay que ver que valor tienes. Y si, valor tiene y mucho y, por Dios que me inspira, es una mujer dedicada a su familia, a superarse como mujer y esposa y decidida a poblar España con hermosos niños, chichos, pero hermosos.
Dentro de días nos hará un regalo a todos, una niña que aún no tiene nombre y que va directa a encabezar la lista de mimadas, niña que vendrá al mundo de la forma mas natural del mundo al seno de una familia algo loca, pero que todos formamos una piña.
Bueno “Tía favorita”, me inspiras a buscar la paz en mi interior, a relajarme y a ver con otros ojos mas positivos… Aunque no vea a los niños fantásticos, educados y tranquilos… veo a mis niños, a mis chicos y a mis hombres… que siendo unos chichos revoltosos e impulsivos serán grandes, amorosos y fantásticos siendo ellos mismos.
A mis niños Jorge y Pablo.