Adiós al pañal.

Este es el adiós mas difícil para algunos niños y en estos incluyo a los míos. Con Enyel estuve 2 meses yendo al baño cada hora/ hora y media y repitiéndole incansablemente si tenía ganas de hacer, mi firmeza y mi insistencia dieron sus frutos y en 2 meses el comenzó a ir solito y a decir cuando tenía ganas, vamos, me sentí como si hubiera ganado un premio Nobel, porque un niño independiente y terco como es él, que me lo puso complicado aunque mi resumen da una sensación errónea de facilidad.

Ahora con el buen tiempo voy a comenzar con Bryson y desde ya noto una gran diferencia, Enyel cuando le explique qué íbamos a dejar el pañal para uso exclusivo de las noches y que durante el día íbamos a utilizar los calzones de mayores acepto sin pensarlo, no sé, pero lo convencí a la primera, pero mi mimoseen le está costando la vida aceptar esta decisión, se niega en rotundo.

Hoy mismo le he vuelto a repetir que desde el 1 de Mayo íbamos a dejar el pañal para uso exclusivo de las noches y no saben que me contesto, me dijo que ¿Por qué?, si él estaba a bien así! Emm!!, si, así de claro, me dejo sin palabras, solo me dieron ganas de decirle que en el super ya no iban a vender más los pampeers! Jajajaja.

Aun que suene de broma, este es un “As” que me estoy guardando por si las moscas…

Voy a intentar buscar algo que lo motive y chantajearlo (positivamente) para que acepte la decisión, porque si el mismo no está de acuerdo, se que va a ser en balde comenzar.

Mi madre me dice que lo que tengo que hacer es dejarlo corretear por la casa como lo traje al mundo durante unas semanas, para que él cuando tuviera ganas hiciera sin vergüenza y pasado estas semanas comenzar a llevarlo al baño cada hora.

El plan la verdad me gusta mucho, ¿pero tendré que tenerlo todo el día en el jardín?, para que haga sus cositas de forma natural en el patio, por qué dentro de casa no me agrada que se me vaya agachando en todas las esquinas… mmmmm, esto es lo que no me convence… totalmente cada hijo, cada niño es un mundo. De los mios el más independiente y necio acepto la idea a la primera, aunque me dio sus dosis de desquiciamiento maternal… y el mediano, amoroso y tranquilo ha decidido que le gusta su situación actual, con todo lo “mayor que dice ser”.

Deprisa.

El tiempo pasa demasiado rápido, mi hijo Guillermo va camino de los 6 meses de edad, y parece que fue ayer cuando nació, cada día que pasa algo a cambiado en él.

A sus 5 meses es un niño tranquilo y dormilón. A penas se siente en la casa, me sorprendo por verlo tan manejable, comparado con sus hermanos, él es el verdadero ángel de casa, todo le cae bien y no reguñe por nada.

Todo el mundo en mi casa me dice, que no me haga ilusiones y que no siempre será así, que llegara el momento en que crecerá, andará y hablará como sus hermanos y cuando llegue ese momentos, tengo que estar preparada para esos tres hombrecitos, que son iguales a una tormenta tropical, que acaban con todo lo que pillan a su paso.

Mientras tanto, yo lo besos y lo abrazo y le susurro, que no crezca tan rápido, que se quede un tiempito mas así, pequeño y tierno.

Pero los días pasan y el va cambiando, ya no sonríe a todo el mundo, frunce el entrecejo cuando no le agrada algo y cuando quiere que lo levanten eleva sus bracitos, mmmm… es que es tan tierno… Cuando alguno de sus hermanos le esta molestando hace amago de llantos, por que sabe que ellos enseguida se alejan de él, para no verlo llorar...

Entre dos.

Hace unos días mi esposo con la ayuda de mis dos hijos mayores estuvo ayudando en una reforma en casa de mi hermano, una obrita simple donde los niños los ayudaron. Los pequeños estaban encantados, andaban picando paredes y suelos como dos adultos, su padre estaba súper contento con ellos, decía “que hijos más eficientes tengo y que rápido aprenden” y si es cierto, demasiado rápido aprendieron.

Días después de esto para ser exactos el lunes 19 de Abril, salí de casa a hacer unas compra y deje a todos mi rol de varones en casa, unos dormidos y otros maquinando travesuras… y yo, ingenua de mi, salí confiada, salí pensando que no iba a pasar nada, no en balde estaban con su padre.

Aproximadamente 4 horas después llegue a casa y le pregunto a “PADRE/ESPOSO”, que donde están los niños?, y me explica que Enyel y Bryson llevan jugando en la habitación toda la tarde, y yo ¿Qué?, no, eso no puede ser, son incapaces de estar entretenidos sanamente tanto tiempo, pero ¿los has vigilado? Y “PADRE/ESPOSO”, claro, de vez en cuando… mmmmmmmmmm, yo mosqueada, con mi cara de situación y temiéndome lo peor entro en la habitación y adivinar, mis hijos habían picado toda la pared, como lo leéis, había cogido el martillo de papa y juguetes de obras de ellos y estaban jugando a hacer una reforma en casa, igual que la que habíaN hecho en casa de MI HERMANO.

(Entra el tema educación, en ese momento ¿qué haces?, los matas o los castigas)

Yo me quede momificada y enfadada y solo atine a decirle a “PADRE/ESPOSO”, ves, esto es lo que sucede cuando no estás atentos de ellos y el contento, -no es nada mujer, mañana vuelvo a nivelarla y la pinto y como nueva… (ÉL no estaba enfadado, simplemente se lo había tomado como una travesura… pero eso se puede llamar travesura yo cuando era niña no hacia esas cosas, ¿tanto han cambiado los tiempo?)

Martes 20 “PADRE/ESPOSO” volvió a darle luz a la habitación, NIVELADA, PINTADA y realmente la dejo más BONITA de lo que estaba y se me fue el enfado, le explicamos a los niños que eso no se hacía y le impusimos un merecido castigo y bueno, todo parecía que se quedaría hay, en una trastada!.

Ayer cuando mis monstruitos mayores regresaron del colegio, tuvieron otra genial idea, cogieron sus temperas de pintura y me hicieron un mosaico en su habitación recién pintada, cuando vi eso me dije: - LAHILA tu lo estás haciendo bien, es que no todos los niños son igual de obedientes y los tuyos hay que enseñarles a base de castigos!.

Hoy me río al recordar las caras de circunstancia y sus excusas:

-Mami es para ti!, un regalo por ser la mejor mamá del mundo.

Cada día me sorprenden mas, no sé de dónde sacan tantas ideas para hacer travesuras, no sé de donde aprenden tantas excusas y no sé como logran ablandarme…